Las membranas cerámicas son membranas asimétricas porosas preparadas a partir de materiales como alúmina, óxido de titanio y zirconia mediante procesos especiales.
La filtración por membrana cerámica es un proceso de separación de fluidos en forma de "filtración de flujo cruzado". Impulsado por la presión, el líquido crudo fluye en el tubo de membrana, con pequeñas moléculas pasando a través de la membrana mientras que el líquido concentrado que contiene moléculas grandes es retenido por la membrana, logrando así el propósito de separación, concentración y purificación de líquidos.
La precisión de filtración de la membrana cerámica generalmente se basa en la microfiltración y el tamaño de poro de filtración comúnmente utilizado es de 50 a 800 nm.